viernes, 29 de junio de 2012

Puta realidad.

¡Basta ya! ¿Envidia? Seguramente. No puedo más. Es como una capa de ropa: cada día, una camiseta, y otra camiseta, hasta que no puedes más; hasta que te ahogas en tu propio sudor, hasta que mueres aplastado en una puta capa de lo que más te puede. Antes que lo tenía no me daba cuenta, y ahora que no está lo necesito, es como el aire, increíblemente necesario en este maldito mundo superficial; imprescindible.
Y el caso es que voy por la calle, y pienso: "¡Ostras, pues igual estoy equivocada y si que esta aún en mi poder!" Pero no, ya no está. ¿Qué espero que algún día regrese? Sí. No es que lo espere, es que sucederá. Y sí, claro que es una tontería, una gilipollez, una puta paranoia más de este universo tan superficial en el que vivimos; pero esta puta paranoia, está destrozando psicológicamente a miles de chicas, como yo. Está haciendo que les de vergüenza salir a la calle o les de terror comer de más. Está puta paranoia ha alejado a personas de sus familias, incluso ha llegado a no poder salir del círculo vicioso en el que les ha encerrado y el final, bueno, prefiero no hablar de él.

Puta superficialidad.
Puta realidad.
Puto mundo.

2 comentarios:

LM# dijo...

Es el texto con el que más identificada me he sentido nunca; he llorado muchísimo.
Eres increíble Sonia.

Cuadrado no, REDONDO dijo...

Muchas gracias! :)